Que el amor nos salve de la vida

 Nombre Original: Que el amor nos salve de la vida
Autor: David Escamilla
Editorial: La Galera
Libros: 1
Género: Romance












SINOPSIS: Elena tiene diecinueve años y acaba de convertirse en becaria del show de Luca, un joven de treinta años, presentador televisivo, con fama de rompecorazones.

Para evitar que su jefe se le acerque, la chica se muestra distante y reservada desde el primer día. Pero pronto Luca se acostumbrará a la eficiencia y seriedad de su nueva asistente. Una noche, la joven se encuentra a su jefe llorando solo en el despacho.... (Goodreads)

OPINIÓN(sin spoilers): ¡Muy buenas!

Hoy os traigo una reseña en la que, ya me disculpo, voy a ser un poco bastante destructiva. En su momento me llamó la atención este libro por su título, que parecía esconder una historia interesante detrás. Aunque, como os podéis imaginar, no lo ha sido.

El principio de Que el amor nos salve de la vida es entretenido, de hecho, más o menos me esperaba una historia así: amena, con alguna que otra reflexión interesante. Lástima que esa primera impresión pronto se va al garete.

¿Por dónde empezar? Es largo. Demasiado largo para lo poco que cuenta. Luego, quizá me pase tres pueblos con esta comparación, pero no he podido evitar pensar que tiene cierto parecido con las novelas eróticas que ahora se han puesto tan de moda (ella, una mosquita muerta con problemas de autoestima pero que en realidad es "adorable", y él, un triunfador mujeriego que, ¿cómo no? tiene sus traumas de infancia), sólo que sin sexo explícitio.

Y ahí no acaba la cosa: parece querer tener un transfondo poético, e incluso crítica social., pero luego se queda en nada. Por no hablar de que la visión que da de los programas de televisión, lejos de resultar interesante, como me pasó en Un fantasma en Nueva York, me parece estereotipada y superficial (¡y eso que el autor es comunicador!). Nada, que todos los temas anteriores son totalmente desaprovechados y al final son un simple pretexto para enmarcar la historia de amor, cuyo avance se hace pesado y en ocasiones poco creíble.

Pero lo que realmente me ha irritado es lo que he bautizado como "postureo Best Friends Forever". La forma de presentar a las amigas es tan cursi y tan artificial que me daba urticaria. El rollo "amiguísimas" es algo que no soporto, ni en la vida real y mucho menos en las novelas. Y no se queda sólo en eso, sino que el grupito de amigas de la protagonista ocupan demasiado espacio en la trama innecesariamente sin aportar nada.


Los personajes principales tampoco son mucho mejor. Como ya os he dicho arriba, los dos son bastante prototípicos. Lo peor es que nos intentan colar que ella es una idealista, cuando el propio argumento nos lo desmiente en un determinado momento, y que él es un romántico con alma de poeta, lo que es bastante contradictorio con su faceta de mujeriego.

Otras cosas que no me ha gustado nada son las escenas de humor (totalmente surrealistas y que no conseguían ni un amago de sonrisa) y la narración intermitente en primera persona, la cual no veo para nada justificada.

El final es de esos en los que sientes alegría, pero no por otra cosa sino porque tras dar tantas vueltas innecesarias, por fin se acaba todo, y ya puedes darle puerta e ir a otra lectura.

En conclusión, Que el amor nos salve de la vida es un libro demasiado extenso, donde varios temas podían haberse aprovechado y darle ese toque de personalidad que parece perseguir y nunca alcanzar, en parte por centrarse en una relación tópica que no despierta el más mínimo interés. Vale, sí he sido muy dura con la valoración pero es que habían partes que mientras las leía me ponían de los nervios y que despierte semejante odio en mí me impide ser más objetiva. Si hubiese sido más corto y el autor nos hubiera ahorrado la presencia de las "amiguísimas", tal vez me habría gustado más.

Lo recomiendo para la gente a la que le gusten los libros al estilo Blue Jeans, porque me ha recordado bastante a su forma de escribir... (y no en el buen sentido).

De todos modos, no voy a ser del todo mala con la puntuación, porque, a pesar de todo lo dicho anteriormente, he leído libros mucho peores.