LIFE

Nombre Original: Life
Autora: Keiko Suenobu
Año: 2002-2009
Editorial: Norma Editorial
Tomos: 20
Género: ¿Shojo? ¿Seinen? Terror Psicológico, Bullying











SINOPSIS: Ayumu está a punto de presentarse a los complicados exámenes de ingreso al instituto, y para seguir estando junto a su gran amiga Shino decide intentar ingresar en el mismo instituto que ella, a pesar de que sus notas son mediocres. Pero es Ayumu, y no Shino, quien consigue plaza en el prestigioso centro.

El rechazo de Shino, que llena de rabia acusa a su amiga de su fracaso, sume a Ayumu en un estado de apatía y depresión que solo consigue aliviar autolesionándose, haciéndose cortes en las muñecas con un cutter. Y con su entrada en el nuevo instituto, su situación no va hacer más que empeorar... (GoodReads)

OPINIÓN(sin spoilers): ¡Muy buenas!

Resumiendo en pocas palabras: Life es un manga que siempre me llamó la atención, porque todo el mundo lo ponía como un shojo adulto y distinto, además de que ya de por sí el bullying es un tema que siempre consigue captar mi atención.

Lo empecé de segunda mano y finalmente este año pude completarlo, ya que a la editorial le vendió mal y tardó lo suyo en sacar los tomos restantes (pero la acabó, y yo con eso ya soy más que feliz).

Life no es un manga apto para mentes sensibles, empecemos por ahí. A la gente a la que no le guste sufrir con las historias, mejor que vaya a otra parte, porque precisamente esa es su principal característica. Y también la razón por la que me ha gustado tanto.

Por desgracia para mí, rara vez me suelo implicar en las historias. No sé si es que ya he leído/visto demasiado o que me vuelvo más rancia con los años, pero pocas me hacen reír o llorar. Por eso, cuando comencé este manga, me enganchó como pocos. Me metí de lleno en la trama, sufría con todas y cada una de las malas pasadas que le hacían a Ayumu, sentía rabia y ganas de que las personas que se lo hacían  recibieran su merecido y me alegré ante las pocas alegrías que encontraba la protagonista en ese mar de lágrimas. Llamadme masoquista, pero para mí un buen manga es aquel que consigue lo que éste: que te impliques, que sufras, en definitiva, que sientas.

Es cierto que el retrato que ofrece Keiko Suenobu del Bullying no es 100% realista: aunque está inspirado en algunas experiencias reales (en cartas que le han llegado a la autora sobre el tema y demás), se trata de una representación deformada del mismo. Tal y como Suenobu reconoció el en free talk del último tomo, en este manga, el Bullying está dibujado de manera exagerada, ya que sería complicado que a una sola persona le pasaran todas esas cosas juntas.

Es algo que hay que tener en cuenta a la hora de leer Life para no malinterpretarlo: este manga no pretende ser por completo verosímil sino denunciar el Bullying. Es como un testimonio de todas las malas vivencias, contado casi en clave de terror. Porque, desde luego, Life está lleno de escenas perturbadoras, demostrando que un puñado de adolescentes pueden dar más miedo que cualquier relato de terror.

Reconozco que, aunque entiendo la intención de la autora, este detalle hizo que en determinados momentos la trama me chirriara un poco, por no hablar de que, en mi opinión, los 8 primeros tomos son espectaculares y luego se sale un poco de madre todo, pero son pequeños defectillos que se compensan sin problemas.

Ayumu puede que ponga nervioso a más de uno, pero yo lo veo un personaje en el que la indecisión y, en ocasiones, la cobardía están perfectamente justificadas, sobre todo teniendo en cuenta que es necesario ese punto de partida para que pueda evolucionar.

Manami es el máximo exponente de cuánto puedes llegar a implicarte en este manga. Ya no sólo porque protagoniza las escenas más aterradoras sino porque es inevitable odiarla con toda tu alma.

En cuanto a la trama romántica, me encantó que no hubiera ninguna (bueno, hay una, pero a penas tiene relevancia), ya que sería muy fácil el clásico recurso de protagonista desamparada a quien le salva el amor de un chico que da la cara por ella. Pero no. Si esta obra se centra en algún tipo de relación es la de amistad, entre Ayumu y Miki.

El dibujo consigue transmitir todo lo que debe, ya sea alegría en los momentos más luminosos, o desesperación, cuando la situación no puede ser más negra, o hacer que te corra un sudor frío cuando a cierta persona se le va la pinza...

El final es el que tenía que ser, y no hay más. Ahora bien, la única cosa que eché en falta fue que cierto personaje no se saliera de rositas.

 En definitiva: Life es un manga que una vez empiezas a leer no puedes parar. Es una obra reivindicativa, ya que busca denunciar el Bullying y para ello la autora lo muestra de manera exagerada, pero muy efectiva, consiguiendo que el lector conecte con el sufrimiento de los personajes.

Así que ya sabéis, si no sois muy amigos de los mangas que te lo hacen pasar mal, mejor pasad a otra cosa, pero si lo que buscáis es encontrar una historia dura que consiga que te impliques en ella, no dudéis en darle una oportunidad. Os garantizo que sus 20 tomos se pasarán en un abrir y cerrar de ojos.

(Nota real: 4'5/5)

PD: Estaría geniaaaal (pone ojitos suplicantes), repito, estaría supercalifragilísticaespialidosamente geniaaaal, que alguna editorial (y no miro a nadie... cof, cof, Milky Way) se animase a traernos esa otra obra de la autora, Limit, que tan buena pinta tiene... Yo lo dejo caer...