Desconexión

Nombre Original: Unwind
Autor: Neal Shusterman
Editorial: Anaya
Colección: Anaya Juvenil
Libros: 2



















SINOPSIS: En EEUU se produjo la llamada Guerra Interna en la que se enfrentaron el ejército pro vida y el pro libre elección. Finalmente; se aprobó el Tratado Vital, que satisfacía a ambos bandos y que establecía que la vida humana es algo intocable desde que el niño nace hasta los 13 años, después de los cuales, los padres pueden, entre los 13 y los 18, decidir si desean conservar a su hijo, o, por el contrario, "desconectarlo", método por el que se utiliza el cuerpo del niño para trasplantes médicos, entre otras cosas, por lo que técnicamente, sigue con vida. La desconexión se convirtió en algo bien visto por la sociedad... hasta que te pasa a ti.

OPINIÓN(sin spoilers): ¡Buenas! Últimamente estoy muy atareada con cosas del instituto (ya no son exámenes, pero digamos que tenemos "proyectos en marcha"), pero he sacado un rato para colgaros la reseña de un libro que terminé el lunes (ya sé que todavía tengo pendiente la de Real Murders, pero es que tenía muchas ganas de hablaros de este libro >_<).
Como sabéis, gané Desconexión en un concurso que organizaban La pluma del ángel caído y Anaya (¡muchísimas gracias desde aquí!) por lo que no es un libro que tuviera en mente leer. Lo cierto es que no había oído hablar ni de la novela ni del autor (y eso que es el de una trilogía bastante conocida en el mundillo: Everlost) y si no hubiera sido por el concurso, no creo que lo hubiera leído.
Y es aquí cuando me alegro muchísimo de haberlo hecho: el libro me ha ENCANTADO. Me ha gustado tanto que ahora me han entrado ganas de leerme la otra saga de Neal Shusterman >_< Aunque con tantos libros pendientes en mi estantería (¡y ya casi es mi cumpleaños, por lo que aún me regalarán más!) no creo que compre libros en una buena temporada...

Pero os hablaré de Desconexión: sí, es una distopía, pero a mí me ha parecido diferente en muchos aspectos. Primero: es de las pocas distopías que he leído que no parece que sea una excusa para desarrollar una historia de amor. Vale, ya sabéis que a mí me gustan los libros con romance, pero al final, tras leer una distopía tras otra que todas giran alrededor de lo mismo... una termina cansándose. Y sí, Desconexión tiene una trama amorosa, pero está en segundo plano, y no es el principal tema del libro. Esto ha hecho, en mi opinión, que el mensaje llegara con mucha más fuerza.
Es este mensaje el segundo punto (y el más importante) que le hace diferente de las otras distopías: su mensaje llega alto y claro. Desconexión trata el tema del aborto y lo que eso conlleva. Nos muestra un mundo en el que el aborto está absolutamente prohibido. En este futuro todas las madres que tengan un hijo deben tenerlo y cuidarlo, o dejarlo en la puerta de alguna casa (esto no es algo legal, pero muchas madres lo hacen) y si tú encuentras un bebé en tu puerta, debes hacerte cargo de él. Es ahí cuando te preguntas... ¿qué es mejor? ¿Acabar con un bebé antes de tenerlo? ¿O tenerlo y al no poder cuidarlo abandonarlo y entregárselo a una familia a la que, probablemente, también será un lastre? Y ya no hablemos de la desconexión, una práctica que realmente me ha puesto los pelos de punta. Pero lo que más me ha conmocionado es que... quizá no estemos tan lejos de ese mundo. Quizá en un futuro hagamos cosas parecidas o peores. Esas y muchas más cuestiones plantea Desconexión.
Los personajes, y mira que es difícil conseguir eso, me han encantado. Absolutamente todos. Connor, Risa y Lev me han conquistado. Son tan... humanos. A pesar de ser prácticamente unos niños, se enfrentan a todo lo que les viene por delante. Además, evolucionan de manera creíble (no como algunos libros en los que los protagonistas se vuelven héroes de la noche a la mañana), especialmente el personaje de Lev. El resto también están muy bien construidos: Roland, Hayden, el Almirante, CiFi... cada uno aporta su granito de arena a la historia, y más de uno dice o hace alguna cosa que se te queda grabada (ahora bien, una de las escenas de Roland hacia el final hizo que se me removieran las tripas... realmente espeluznante).

Y ya concluyo (perdón por excederme, pero es que tengo tantas cosas por decir... y aún me he dejado muchas cosas en el tintero >_<): Desconexión es una historia que recomiendo muchísimo, una distopía diferente a las demás, que invita a reflexionar, pero no se queda en el simple planteamiento: está llena de escenas que se te graban en la memoria y que llegan con fuerza, pocas historias han logrado plantearme tantos dilemas morales como lo ha hecho Desconexión. La narración es muy particular: es en tercera persona pero cada capítulo está centrado en un personaje. Y una cosa que consigue, y mucho, es crear escenas en las cuales se desvela un dato tan alarmante sobre la historia... que te gustaría ponerte a gritar: "¿CÓMO? ¡IMPOSIBLE!" (quizá a vosotros no os pase, pero a mí me pasó en más de una XD).
 He leído que ya ha salido una segunda parte (lo cual me ha extrañado, porque el final del libro parece de libro autoconclusivo...) y que los derechos están comprados para hacer una peli. No diré nada de la segunda parte, porque no quiero juzgar antes de leer, pero justo mientras leía este libro no paraba de pensar: "Este libro debería convertirse en película". Así que... ¡solo espero que no tarde mucho!